Mención Honrosa
Lautaro Manquepillán era un artista frustrado que simulaba ser ingeniero informático de la Chile. Pintaba paisajes espléndidos y a veces pintaba sonrisas. Un día, Lautaro se cansó de fingir y se perdió en la montaña. Nadie más supo de él. Existía en ese entonces un rumor sobre una bestia montañesa voladora que despojaba sangre. Se decía que sobrevolaba los paisajes más bellos. Un día, mientras unas personas acampaban a los pies del Plomo, vieron a un hombre aparecer entre la niebla. Llevaba entre sus manos una roca ensangrentada que semejaba una paleta de colores y la cola de un caballo.
Nicole Cerpa Vielma, años, ., 30 años,
Santiago.