Tercer Lugar
Lilly es la florista del barrio. Vende las flores más hermosas y llamativas, atrayendo a toda clase de visitantes que, embelesados por su misticismo, la visitan a diario. Lo que nadie sabe es que, a la medianoche, se dirige presurosa al Cementerio General, y una a una saca las flores de sus tumbas que impacientemente la esperan con los brazos extendidos. Le gusta pensar en sí misma como la florista de los difuntos, y les promete volver, tal como lo había hecho su abuela, su madre, y como lo hacía ella, cada noche sin falta.
Gabriela Yuseff Valenzuela, 29 años, Providencia.
Ilustración: @daniielahiguera