EL PLUMA

Talento Mayor

Era zurdo y delgado como látigo. Con dedos largos y reflejos de gato, trabajaba alivianando incautos en las calles de la ciudad. Si había que correr, cortaba el aire con su perfil afilado, pero acorralado se terciaba decidido con la izquierda armada. No sabía escribir, pero daba todo por la Paty y el Manuelito. Largos años después, un mediodía otoñal fue fotografiado, ya canoso, en el paseo Ahumada. Dos carabineros lo flanqueaban. Traía las manos impedidas y la boca sangrando, pero caminaba erguido y con la mirada alerta.

Jorge Rafael Sariego Mac-Ginty, 71 años,
Casablanca.

Ilustración: Paula Bustamante.