Mención Honrosa
A un amigo mío de la oficina, que es el rey de los optimistas y a quien nunca se le ve triste, le pregunté cierto día cuál era su fórmula. Estoy muriendo, me respondió simplemente. Avergonzado de mi torpeza le pedí disculpas, pero él repuso sonriendo: ‘¿Y acaso tú no?’.
César Serrano, 54 años,
San Miguel .