DEPURACIÓN

Mención Honrosa

El fuego comenzó subiendo por sus pies, la llama se expandía ferozmente hacia arriba mientras ella la miraba sin importarle. Sus piernas eran antorchas que dejaban caer pedazos de cenizas mientras ardían, siguió el pecho, que se consumió de manera violenta, transformándose en una coraza carbonizada, y al final su rostro, quedando arruinado para cualquier recuerdo. El olor era insoportable, ella abrió las ventanas para airear la casa, aprovechó y echó un vistazo asegurándose de que nadie la estaba observando, tomó nuevamente el encendedor, sacó otra foto de su expololo del álbum de recuerdos y continuó su depuración.

Alfonso Rodulfo Dávila, 44 años, Rancagua.

Ilustración: @florenciareid